Crevillent a 5 de febrero, para Compromís per Crevillent las declaraciones del Concejal Manuel Moya son inaceptables por parte de alguien que lleva veinte años gobernando en el Ayuntamiento, según sus declaraciones ahora resulta que los vecinos de un barrio de Crevillent tiene que vivir en unas condiciones de precariedad sin infraestructuras básicas como es pavimentar las calles o la limpieza viaria etc., porque las obras provocarían inseguridad en los vecinos de las calles Macha y Llorens.
Con estas excusas, lo que demuestra el PP una vez mas es su incapacidad para gobernar atendiendo las necesidades de los Crevillentinos. Alega problemas técnicos para actuar en dicha zona por sus características, cuando ya hace más de 25 años que se urbanizaron zonas con las mismas complicaciones y se resolvieron técnicamente, mejorando la calidad de vida de los vecinos.
Ente la petición de los vecinos y Compromís de que se adecente la zona y se dote de los servicios y condiciones básicas que tiene el resto del municipio, al Concejal Manuel Moya no se le ocurre otra cosa que dedicarse a comentar una foto y decir que el tema no tiene solución, por lo que Compromís considera que si el Señor Moya no sabe o está incapacitado para impulsar este tipo de proyectos lo que tiene que hacer es apartarse y dejar que otros elaboren un proyecto para acabar con esta zona deprimida de Crevillent.
Ante estas manifestaciones, el concejal de Compromís Javier Riquelme explica que no se puede permitir que en pleno siglo XXI exista en el Casco urbano de Crevillent zonas tan abandonadas por el Ayuntamiento y que se pretenda justificar con excusas de problemas técnicos que no se sostienen y que vecinos que pagan el IBI, y todos los impuestos y tasas como cualquier ciudadano no tengan el derecho a que se les dote de los servicios básicos que además les corresponden por ley. Por lo que Compromís per Crevillent va a trabajar y seguir insistiendo para que se elabore un proyecto global con todas las garantías de seguridad y condiciones técnicas para cambiar la situación urbanística y de prestación de servicios a los vecinos de estas zonas, cuya situación actual tendría que avergonzar a cualquier gobernante.
