18.09.2017.- Confundir el abuso de poder con la preocupación por extremar las medidas de seguridad, no sólo para los ciudadanos sino también para los que tienen la misión de trabajar para que los ciudadanos se sientan seguros, es una prioridad para los gobiernos del PP, aunque se interprete como abuso de poder, queremos la máxima seguridad para los ciudadanos.
Desde el primer momento que entramos a gobernar, hemos ido mejorando una situación que padecíamos de falta de medios materiales y personales. Se puede comprobar, a través de los presupuestos municipales, como ha evolucionado el área de Policía, Tráfico y Seguridad Ciudadana desde el año 1995, primer gobierno del PP en Crevillent, hasta la actualidad. Todos los recursos se han ampliado de manera sustancial y la seguridad ciudadana se ha mantenido dentro de unos niveles altos en comparación con otras ciudades del mismo tamaño. Sin duda la dedicación y profesionalidad de nuestra Policía Local y los medios materiales y de autoprotección disponibles tienen que ver con esos resultados.
También ha sido una constante facilitar la conciliación familiar y de ello tienen buena muestra todos los policías que han solicitado comisiones de servicio o bien realizar un horario especial diferente al resto de la plantilla de policías o para mejorar la prestación de los servicios se solapan los turnos entrante y saliente, para que no haya vacío de presencia policial en el relevo de turnos. Son medidas que nadie aprecia pero que este Gobierno Municipal ha sido sensible en su aplicación para mejorar la calidad de vida familiar y profesional de los policías.
Aspecto importante tiene la formación profesional que durante 40 horas anuales realizan los policías. Es una medida que forma parte del proceso de formación continua de los policías y que sirve para actualizar los conocimientos en materia preventiva y administrativa, pero también para la autoprotección y este Gobierno Municipal siempre ha sido receptivo a la realización de los cursillos de formación.
Me ahorraré de justificar los calificativos que me adjudica que quizás sean más propios de la vertiente política por la que se presentó a las pasadas elecciones como candidata al senado por el partido de Ciudadanos. En cuanto a las consideraciones personales que me atribuye parece que no todo el mundo piensa igual y los ciudadanos, los crevillentinos que nos dan su confianza, continúan haciéndolo en la medida que piensan de manera diferente a la suya.
Las críticas siempre parten del mismo lado, el Gobierno Municipal no inicia una discusión con la Policía en los medios de comunicación pero siempre se les contesta porque no tenemos que esconder nada y nuestra obligación es informar a los ciudadanos de las medidas que se toman en cada momento para mejorar la seguridad ciudadana en fiestas y el resto del año. Si no informásemos a los ciudadanos, nos acusarían de ocultismo, de opacidad informativa, etc. y si informamos es para sacar barriga o para desprestigiar a la Policía.
A pesar de las quejas de muchos ciudadanos, siempre hemos defendido el trabajo difícil que realiza con mérito nuestra Policía. Sin embargo es lamentable el poco aprecio que se hace de las vidas de los demás. Sabemos que somos “poquita cosa” pero un mínimo respeto hacia las personas es imprescindible para la convivencia, cuestión que se pone en entredicho por esa parte.
Siempre se incurre en el error de mezclar el trabajo policial con la negociación sindical y de nuevo tenemos que indicar que son dos caminos separados que en nada tienen que interferir. La seguridad de los ciudadanos no está en discusión, lo que se discute es el sueldo de los policías y de la plantilla de personal del Ayuntamiento.
EL CONCEJAL DE SEGURIDAD CIUDADANA
Manuel Moya Ferrández.
