Este lunes se ha dado a conocer el resultado del juicio a exmiembros del Partido Popular en la Comunidad Valenciana quedando demostrado el desvío de fondos y la malversación con la que el partido actuó y que ha reportado sendas condenas a varios de sus dirigentes. Entre los actos que la trama Gürtel utilizó para esta financiación ilegal se encuentra un acto realizado en Crevillent por un valor de 39.900 euros. Una cifra poco desdeñable si la comparamos con el dinero desviado en otras ciudades. Según la sentencia el acto en Crevillent supuso un gasto más elevado que los actos de Gandía, Elda y Alcoi juntos todos ellos.
Para el portavoz de L’Esquerra, Josep Candela, “se demuestra aquello que ya teníamos asumido. Hemos sido gobernados por ladrones y el álbum de fotos de César Augusto Asencio, alcalde de Crevillent, empieza a parecerse a una serie carcelaria de televisión. Como mínimo en nombre del partido deberían pedir disculpas a los valencianos, empezando por sus votantes y los crevillentinos que acudieron a un acto del que se sirvieron para lucrarse unos pocos”.
En este sentido Cesar Augusto Asencio, alcalde del Partido Popular, tuvo que declarar en calidad de testigo ante la Audiencia Nacional tras varios intentos infructuosos por parte del alcalde de que el juzgado desestimara su comparecencia.
“Nos contaron que Blasco era un caso aislado, Milagrosa Martínez otro, Serafín Castellano otro, Ricardo Costa otro, y así podríamos seguir” Y ha insistido Candela Muñoz “No tardaremos en ver como se retira cada placa con el nombre de Eduardo Zaplana que haya en Crevillent y será un gobierno del PP o de otro signo en unos meses el que lo haga”.
Según la sentencia “El Grupo Político, actuando en nombre y para el Partido Popular de la Comunidad Valenciana (PPCV) y con el objetivo de conseguir financiación por encima del límite legal establecido, contrató con la sociedad del Grupo Correa Orange Market SL para que ésta realizara actos y servicios de campaña de todo tipo, pero en vez de pagar el PPCV a la sociedad contratada, es decir Orange Market, procuró que estos gastos electorales fueran satisfechos por una serie de empresarios que, además, eran adjudicatarios de obras, servicios o suministros concedidos por la Administración regional y/o local”; La sentencia añade que, “para cubrir esta anomalía, básicamente se elaboran una serie de facturas mendaces que cubrirían unos supuestos servicios de Orange Market a estos empresarios“; Este fue el sistema que se utilizó en el acto de Crevillent.
Crevillent, 12 juny 2018
