La formación naranja puede pasarlas moradas antes de Halloween

Ya rondaban por la calle rumores de que alguien tenía la intención de realizar una «jugada política» que podríamos calificar de «interesante» para su análisis. 

Dicen los rumores, que Dña Lelia Laura Gomis Pérez, concejal no adscrita del Ayuntamiento de Crevillent, después de salir del Partido Socialista tras conseguir la concejalía, colaborar con la plataforma «Vecinos por Crevillent», para posteriormente integrarse en el partido «Contigo somos democracia», ha entrado a formar parte, presuntamente, a la familia del partido Ciudadanos en Crevillent. No, no iba sola, le acompañaban, también según rumores, alrededor de una veintena de nuevos afiliados, entre amigos y familiares que la acompañan en esta nueva andadura.

No sabíamos si esta presunta acción era parte de una estrategia, intuíamos que sí, siguiendo un árbol de encaminamiento que ha incluido una campaña de promesas en la televisión local que ya te llevaba a intuir que algo iba a pasar.

Por supuesto, hemos querido, fieles a las normas de buena praxis periodística, que los dos, o uno de los actores de esta información, Dña. Lelia Laura Gomis Pérez, como D. José Javier Soriano, portavoz de Cs Crevillent, nos verifiquen o nieguen este hecho.

La contestación que nos remite Dña. Lelia Laura Gomis Pérez es que hasta el próximo viernes 19, no dará cuenta de sus  actos. Esta respuesta es fácilmente relacionable con el hecho de que el jueves se ha convocado una asamblea de Cs Crevillent, con el propósito de dar la bienvenida a los nuevos afiliados.

D. José Javier Soriano, portavoz de Cs Crevillent, nos ha contestado confirmando la afiliación de Dña. Lelia Laura Gomis Pérez en Ciudadanos, además de la inclusión de unos cuarenta nuevos afiliados. Por otro lado, también verifica que el próximo jueves ha sido convocada una Asamblea para recibir a los nuevos afiliados. Queda verificado pues cada uno de los hechos.

Esta nueva situación descubre nuevos escenarios.

Por un lado, la situación dentro de Cs Crevillent se vislumbra como interesante, en cuanto a su dificultad. Se forman claramente dos bandos que presumimos entrarán en colisión a la hora de decidir quién va o no va, y en qué puesto va,  en las próximas listas electorales.

No cabe duda de que la formación naranja puede pasarlas moradas si no vacunan con rapidez este conflicto potencial.

Por otro lado, la corporación municipal, se encuentra, si todo va como debería ir, con tres votos ligados a la disciplina de Cs Crevillent en vez de dos como tenía hasta la fecha. Esta circunstancia podría afectar a las votaciones del plenario.

En definitiva, no sabemos si el dicho que afirma que «En la guerra y en el amor, todo vale» se puede aplicar a la política, pero visto lo visto, parece que puede haber, a partir de este hecho, más guerra que amor en la política de Crevillent y en particular en  la casa naranja.

 

 

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