Estimado Gregorio:
Como no rebate nada de mi contestación anterior, entiendo que acepta mis rectificaciones a su primera carta.
Leo su segunda carta, otra vez con ese tono teórico y pretendidamente técnico sobre el superávit, que no necesito que me explique ya que lo conozco. Sí que advierto en cambio que es Vd. el que incurre en errores o desconocimientos en sus dos cartas.
Respecto al superávit, que dice que es algo malo y que demuestra una deficiente gestión, no es ese el parecer de la Ley de Estabilidad y Sostenibilidad Financiera, que dice en su artículo 11.4 “Las Corporaciones Locales mantendrán una posición de equilibro o superávit presupuestario”, prohibiendo la ley las situaciones de déficit que son objeto de medidas correctoras obligatorias y por las que pueden ser sancionados los ayuntamientos y los responsables públicos. Es mejor estar en superávit, esto es, con más ingresos que gastos, que en equilibrio, porque ante cualquier eventualidad no controlada (caída de ingresos, sentencias condenatorias, daños etc.) se puede producir una situación de déficit y provocar la intervención económica del ayuntamiento por el Estado.
Ese superávit o equilibrio puede ser inicial en el momento de la aprobación del presupuesto, pero es después al finalizar el año el 31 de diciembre, cuando hay que liquidar el resultado de ese presupuesto, antes del 1 de marzo del año siguiente y en función de cómo ha sido la gestión económica administrativa, la situación puede variar mejorando o empeorando. El superávit puede acabar en equilibro o en déficit, y el equilibro en déficit o superávit. Pueden haberse ingresado más subvenciones de las estimadas, más altas en impuestos, o haberse producido ahorro de intereses, reducciones de precios en las adjudicaciones de contratos … Ese es el resultado definitivo presupuestario del año.
Luego desarrolla Vd. una teoría sobre lo que es el superávit o el remanente de tesorería que no viene a cuento de nada, más allá de los tecnicismos que definen un concepto u otro. Lo importante que hay que entender, y eso sí que lo admite Vd., es que al final las cantidades que resultan de una liquidación de un presupuesto anterior en cada uno de esos conceptos, pueden ser dispuestos dentro de los límites de la regla de gasto y de la estabilidad que ordena la Ley de Estabilidad y Sostenibilidad, de acuerdo con su disposición adicional 6ª.
Pues bien, para saber cómo les dejó el Gobierno del PP económicamente el Ayuntamiento a Vds., hay que acudir a la liquidación que se hizo antes de las elecciones desde la Intervención Municipal, del presupuesto de 2018, que se cifró en una capacidad de financiación o superávit de 4.558.660,93 €. De haber recibido Vds. un Ayuntamiento con números rojos o negativos, lo habrían recibido con necesidad de financiación o déficit, lo que no ha sido el caso.
Y como hice con mi anterior contestación, le voy a citar otro documento elaborado por su propio gobierno, el informe propuesta para la aprobación de la Oferta Pública de Empleo de 2019, suscrito por el funcionario jefe del servicio de Personal y por el concejal de Recursos Humanos del Tripartito, el Sr. Jesús Ruiz, de fecha 4 de diciembre de 2019 y que se aprobó mediante decreto de Alcaldía 1.758 de 19 de diciembre de 2019 y publicado en el BOP de Alicante de 24 de diciembre de 2019. Para publicar esas plazas que van a cubrirse, es necesario acreditar la situación de solvencia del Ayuntamiento. En la página seis, párrafo 4º se dice : “El Informe de Intervención de 28-11-19 establece que se puede concluir que la liquidación del Ayuntamiento de Crevillent para 2018 cumple con el objetivo de estabilidad presupuestaria, arrojando una capacidad de financiación al cierre del ejercicio de 4.558.660,93€”. Añade también que cumple la Regla de Gasto y el objetivo de la deuda y además resalto yo que tenemos el menor endeudamiento de los últimos 40 años. El informe de la Intervención, también se ha elaborado gobernando Vds… Gregorio , deje de intentar desacreditar la muy buena gestión económica que han recibido y procuren no volver a dejar el Ayuntamiento como yo me lo encontré en 1995.
Acabo mí escrito antefirmando con mis títulos, creo que es la primera vez que lo hago, ya que Vd. lo ha hecho con el suyo.
César-Augusto Asencio Adsuar
Licenciado en Derecho y Diplomado en Derecho Tributario y Asesoría Fiscal
